Desde tiempos ancestrales se han asociado los conceptos de simetría y belleza. Todas las culturas de la humanidad han valorado la simetría como un patrón de atractivo físico. Para nuestro cerebro primitivo, el que conservamos desde hace miles de años, el equilibrio en la fisonomía es símbolo de admiración y de lo que consideramos como bello.
Dentro de estos cánones internos y socioculturales de perfección, la simetría dental es una parte fundamental de la belleza integral en hombres y mujeres por igual.
A pesar de que podamos admirar la belleza de “una sonrisa perfecta”, la disposición de las piezas dentales dentro de la arquitectura bucal va más allá de los estereotipos de atractivo.
La distribución de las piezas dentales dentro de la cavidad bucal no obedece solamente a una función meramente estética. La correcta alineación, posición y tamaño de cada pieza dental, tiene una funcionalidad y un papel primordial en el sistema bucal, digestivo y en general, en todo el organismo.
Aunque el posicionamiento dental incide directamente en la salud general, las malposiciones dentales suelen causar disconformidad con el aspecto en muchas personas, e incluso causar complejos y disminución de la autoestima.
La corrección estética es la principal razón de consulta a ortodoncistas en todas partes del mundo. Sin embargo, la ortodoncia considera que la estética es una consecuencia positiva de la corrección funcional de las piezas dentales.
¿Qué es la Ortodoncia?
Aunque es un término de gran difusión en el público general, muchas personas no tienen claro que hacen los ortodoncistas.
La ortodoncia es una especialidad de la odontología encargada de diagnosticar, prevenir y corregir las alteraciones de la posición y de la interrelación entre las piezas dentales y las estructuras maxilofaciales.
Las anomalías del sistema dental y de los huesos maxilares, causan alteraciones de la tensión interdental, invasiones de los espacios dentales y trastornos de la mordida tales como:
- Prognatismo y retrognatismo
- Mordida abierta, cruzada o borde a borde
- Colapsos de arcadas
- Diastemas interdentales
Estos trastornos se tratan mediante la movilización de las piezas dentales a través de la aplicación de técnicas y aparatología diseñada para reposicionar los dientes y los huesos maxilares.
Tipos de ortodoncia más comunes
Los tipos de ortodoncia más comunes que podemos encontrar son:
Ortodoncia Invisible Invisalign®
La ortodoncia invisible o Invisalign® se basa en la utilización de aparatología removible, osea, que puede ser removida de la boca a voluntad del paciente.
Su indicación depende de la patología del paciente, aunque en términos generales se buscan los cambios histológicos de las piezas dentales mediante el estímulo mecánico que produce el aparato.
La ortodoncia invisible o Invisalign, es una técnica que está en auge en los últimos años, pues su efectividad combinada con la estética del tratamiento, lo han hecho muy popular entre los pacientes.
Ortodoncia fija
La ortodoncia fija es un tratamiento no removible que tiene por objeto la corrección de la malposición dentaria y de la arquitectura maxilar, con el fin de prevenir patologías bucodentales. La ortodoncia fija se fundamenta en el anclaje a las piezas dentales de unos elementos metálicos, cerámicos o de polímeros, que traccionan de los dientes por la acción de arcos de alambre de diferente elasticidad.
La biomecánica de la ortodoncia fija se fundamenta en dos fases: una activa y una pasiva. La parte pasiva tiene como función transmitir tensión desde el aparato a los dientes. La parte activa se encarga de ejercer fuerza sobre las piezas dentales con el fin de generar movimiento.
Los brackets se pueden fijar en la cara externa del diente o en la cara interna, lo que se conoce como ortodoncia lingual o invisible. Los brackets, alambres, ligaduras, arcos, bandas, muelles y otros aditamentos, son las piezas que se usan generalmente en esta ortodoncia.
¿Cual es el mejor tipo de ortodoncia para mi?
La indicación de un tipo u otro de ortodoncia debe ser establecida por el ortodoncista. Cada patología, combinada con las condiciones específicas del paciente, se estudian conjuntamente para diseñar el plan de tratamiento más adecuado para cada paciente, teniendo en cuenta siempre los deseos y circunstancias de cada uno de ellos.
Incluso durante el tratamiento, se pueden mezclar varias técnicas y aparatos, con la finalidad de corregir las anomalías del sistema bucodental y mejorar el posicionamiento, funcionalidad y, en última instancia, la estética dental y de la sonrisa.
Hasta hace muy pocos años se pensaba que los tratamientos de ortodoncia estaban destinados únicamente a niños y adolescentes. En la actualidad, los tratamientos de ortodoncia se aplican a personas de todas las edades, siendo los adultos los pacientes que con mayor proporción asisten a la consulta del ortodoncista buscando mejoras en su salud dental.
Del mismo modo que no existen dos personas iguales, no hay dos tratamientos de ortodoncia exactamente iguales. Lo ideal en todos los casos es contar con el apoyo de los mejores profesionales ortodoncistas, que constituyen la mayor garantía para adoptar las mejores soluciones en el cuidado de nuestra salud dental.